Cuando los incendios llegan, y siempre lo harán, ¿Cómo respondemos?
Había una joven dotada de sueños. Nació en una familia religiosa que no la entendió.
“¿Por qué siempre sueñas despierta?”
Su madre la reprendió y por eso la niña dejó de hablar en voz alta de sus sueños. Se amaba a sí misma, y por lo tanto amaba sus sueños en secreto. Por lo que la niña comenzó a escribir y guardar sus sueños para sí misma.
La niña estaba enarmorada por las cualidades de la vida que eran difíciles de ver con sus ojos. Ella amaba las voces suaves de los robles en el viento.
La niña le encantaba pasar tiempo en el jardín de su abuela. La niña se acostó en el pasto y miraba como los colibríes volaban entre las flores.
La niña miraba a los colibríes como un bebé mira a su madre, absorbiendo todo movimiento con sus ojos.
Un día mientras la niña salía del jardín un colibrí apareció muy cerca de su oreja y que la asustó. El colibrí comenzó a hablar en un idioma que no se puede escuchar pero lo entiende.
El colibrí dijo: “Este verano los incendios llegarán temprano y los fuegos bailarán por los cerritos.” Y el colibrí se fue volando.
El tiempo estuvo de acuerdo con el colibrí, y el colibrí demostró la naturaleza del tiempo.
Los incendios bailaron en los cerritos y la gente del pueblo comenzó a evacuar sus casas. Ella lloró como si hubiera un agujero en su corazón.
¡Pero, ella vio un colibrí! El colibrí la observaba desde un rosal. La niña se despidió.
El colibrí dijo en la voce del abuelita: “No estoy seguro del futuro, pero estoy seguro del viento.”
El Archivo, Compendio, Universidad de Estánfor 2022年
Maestro Juan Valdez
